La calidad del huevo es uno de los objetivos clave para los productores de huevo incubable y para plato. Esta definida por caracteristicas internas y externas, como integridad del cascarón, textura, forma, color, limpieza, así como por la calidad de la yema y el albumen, entre otros cosas.
Una cáscara de huevo fuerte asegura un almacenamiento y transporte fáciles de los huevos. Además, algunos mercados muestran preferencias por un determinado color o tamaño. Criar animales sanos con el perfil mineral y nutricional adecuado es fundamental para conseguir una cáscara de huevo fuerte. La formación de la cáscara de huevo es un proceso muy complejo, lo que supone un alto riesgo de que se produzcan imperfecciones en diversos puntos de los oviductos de las gallinas. La raza y edad de la gallina, la muda y el estrés (debido al calor), así como las enfermedades, también afectan a la producción y la calidad de los huevos. La nutrición constituye un importante modulador, pudiendo tomarse varias medidas para optimizar la calidad de la cáscara del huevo.
La optimización de la cáscara de huevo debería tener en cuenta múltiples parámetros: el tamaño del huevo, la gravedad específica de este, el color de la cáscara, la resistencia de la cáscara a la rotura, la deformación de la cáscara (de carácter destructivo o no), el peso de la cáscara, el porcentaje de cáscara, el grosor de esta, la suciedad y la ultraestructura de la cáscara. A este respecto, son cruciales los factores nutricionales como el calcio, el fósforo, las vitaminas, la calidad del agua, los polisacáridos sin almidón, las enzimas y el control de toxinas. La clave estará en administrar el perfil correcto de minerales y vitaminas. La nutrición también puede desempeñar un papel importante en la optimización de la digestión de los polisacáridos sin almidón, por ejemplo, mediante la administración de los probióticos correctos. Con una microflora optimizada, el animal digiere mejor y asimila de manera eficiente todas las vitaminas y minerales que necesita para mantener una alta calidad de la cáscara del huevo.